El gran reto de Memo Velázquez

Retórica
Alberto Rocha Vázquez

La designación como candidato del PAN a la gubernatura de Puebla puede tener dos vertientes, una es que el alcalde con licencia de Atlixco, Guillermo Velázquez Gutiérrez sea un candidato a modo y otra que tendrá que hacer hasta lo imposible por quitarse la pésima imagen que está dejando por el tortuoso inicio de su administración.

Para el ex director del ITSA y del IAPEP, es sin duda el mayor reto de su vida, pues tiene que sacar el mayor número de votos para su partido, si es que no quiere desaparecer en la entidad.

Pero como hacerlo si en el inicio de su gestión ha dado muestras de tibieza, de no controlar a gran parte de su equipo -que ya sienten que son dioses en el poder- y que creen que minimizando la gravísima ola delictiva que azota Atlixco se resolverá lo que ellos llaman “percepción”.

Tal vez Velázquez Gutiérrez llega con muy buenas intenciones de trabajar para que por lo menos sigan siendo un importante bastión del panismo nacional, pero en política las intenciones no bastan.

Debe poner orden, jalar algunas orejas y poner a trabajar en serio a sus divas, ya que no se recuerda algún inicio igual en anteriores gobiernos municipales, ni siquiera el pasado de José Luis Galeazzi, quien fue de los peores y el que por poco hace que el PAN mordiera el polvo en la pasada elección.

Mucho se dijo en campaña que tendrían que redoblar esfuerzos y sacar la casta para que en los siguientes comicios no sufran para retener la alcaldía, aún no se ve que lo hagan y tampoco se sabe si harán lo mismo ya siendo candidato a la gubernatura, sobre todo ante el escenario tan gris que se ve para los albiazules.

Por su bien, ojalá se bajen de su nube esos personajes que quieren ser las nuevas vacas sagradas, pero que carecen de trabajo y capacidad para resolver conflictos.