EL NARCOTRÁFICO Y LA INSURGENCIA”
Columna
de
Héctor Manuel Pérez Cuéllar
EL
NARCOTRÁFICO Y LA INSURGENCIA”
Desde
la perspectiva de la Doctrina de la Guerra Insurgente, Mao Tse-Tung, afirma que
el apoyo de la población es necesario para tener éxito, pues con ello los
espacios vitales para moverse y lograr desestabilizar al Estado se reducen y su
inminente derrota es factible, el Narcotráfico hoy se puede ver como una acción
de Insurgencia de acuerdo a los escenarios que observamos a lo largo y ancho
del País, este flagelo está cada día más arraigado en las poblaciones rurales y
semirurales, donde la mano de la Justicia está muy lejana y, se hace invisible
ante tanto conflicto bélico de los grupos criminales.
Desde
tiempos inmemoriales, México sufre de acciones que en muchos casos se disimulan
como actos de Insurgencia, ejemplo los tenemos en el Estado de Chiapas, por
supuesto derivado del abandono Gubernamental, desde el Levantamiento
Insurgente, hasta hoy, los conflictos de grupos que en la mascarada no son otra
cosa que Grupos Criminales del Narcotráfico, estos Movimientos o acciones de la
Criminalidad ha marcado la vida social y política de nuestra Nación, las formas
de visibilizar estos ataques al Estado Mexicano, son tardíos pues en práctica
las Autoridades son lentas en reaccionar, lo que permite, que los embates de la
Delincuencia sean con mayor penetración a la Sociedad, primordialmente a las
zonas antes descritas.
Lo
antes mencionado, permite los círculos negativos que trascienden en la
violencia que vivimos constantemente, los avances de nuevos Grupos Criminales,
los tenemos presencialmente en Regiones como las de los Altos de la Montaña de
Guerrero y, recientemente en Chiapas, en este último caso, tiene por supuesto
el interés superior del control de la Frontera Sur de México, con el alto
tráfico de personas, que en la actualidad tiene una mayor ganancia para los
Grupos de la Delincuencia Organizada, pues alimenta varios rubros de
importancia, como pueden ser, usados como mulas de la droga, prostitución o el
simple cobro de piso por transitar en sus territorios.
El
flagelo del Narcotráfico, no deja de impactar a nuestra Nación, por más que el
discurso Oficial trate de minimizar la grave situación por la atravesamos, los
daños son incalculables tanto en vidas humanas así como económicas pero que
sería entendible, si se avanzara pero lo que vemos, es que se estaciona y
permanece como parte de la estructura de las Instituciones, de una tarea que
será interminable y que forma parte de las Políticas Públicas permanentes y no
con la visión de termino, el caso como ejemplo del CJNG, lo podemos observar
como un conflicto de corte militar, que en la mayoría de las veces rebasa al
propio Ejército, en el campo de combate, pues lo que muchas imágenes muestran
es que hasta han sido desplazados por el grupo criminal, hechos que son
inentendibles, la representación del Ejército es la del Estado Mexicano.
Los
Grupos Criminales, como una visión relevante es la dinámica de adaptación a los
cambios que los obligan en los diversos territorios, va desde la más simple en
poblaciones de un número pequeño de habitantes, que son penetrados por la venta
al menudeo, así como la utilización de estas poblaciones como lugares de
almacén, de paso o de resguardo de armamento y sicarios, estas formas de los
Grupos Criminales de dinámicas de adaptación, permiten que las Autoridades en
lo que visibilizan lo que ocurre, simplemente ellos avanzan en el gran negocio
que todo corrompe.
Viajar
hoy en día, de una ciudad a otra por nuestro sistema carretero, es toda una
aventura de riesgo extremo, los asaltos que se dan son constantes y cada que
sucede son con mayor violencia, lo mismo lo padecen los Transportistas de
mercancías como las familias paseantes, los retenes de Grupos Criminales, son
un asedio de peligro y terror, ahí son sujetos de verse indefensos de ser un
activo de hasta un posible secuestro y, pedir sumas millonarias, donde lo
podemos observar, la tan transitada carretera a México-Veracruz, la de
México-Querétaro o la de Querétaro- San Luis Potosí, en el norte de nuestro
territorio no es la excepción, en fin, la indefensión está presente en todos
lados.
Luego
lo dicho por Mao Tse-Tung no hay error, los Grupos Criminales o Insurgentes se
alimentan de la población civil, para continuar con su lucha que no es otra
cosa que la Criminalidad disfrazada, estás Narco-Guerrillas o Narco-Terroristas,
se enmascaran en el Narcotráfico, para no ser considerados de las formas
anteriores, pero es tiempo que en la narrativa Oficial, los empiecen a
considerar como son realmente, una amenaza tacita al Estado de Derecho de los
Ciudadanos de bien, ello exige que nuestras Fuerzas Armadas actúen en
consecuencia, con toda la Fuerza del Estado, aquel que violenta el Estado de
Derecho, pierde sus Derechos Humanos y se le combate con firmeza real.
Hoy
casi termina, la incorporación de la extinta Policía Federal convertida en
Guardia Nacional totalmente dependiente de las Fuerzas Armadas, no sabemos a
ciencia cierta si funcionará en el futuro, lo hasta hoy exhibido es deficiente
e inconstante, no hay visión de hacia dónde van, solo cubren espacios de
determinada Región en conflicto, pero un proceso definido de actuación, con
respeto no lo hay, van dando tumbos de lugar en lugar, en consecuencia la
Criminalidad está perfectamente Organizada, con objetivos definidos y
realizando con Inteligencia Militar sus acciones.
Desde
la Administración del Presidente Nixon en Estados Unidos de Norteamérica, el
Narcotráfico está en la mira de considerarlos como Grupos Terroristas, acá en
nuestro México, es importante que se empiece una gran campaña de combate
frontal, pues en el futuro puede darnos muchos dolores de cabeza, el minimizar
las acciones del Narcotráfico, no es nada grato para los Ciudadanos, quienes
vemos que hasta se juzgue al Gobierno como un Narco-Gobierno, pone en peligro
la gobernabilidad y estabilidad económica.
“Si no te conoces a ti mismo ni a tú
oponente, en cada batalla serás derrotado”. (Sun Tzu)
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